“Agentes de inteligencia” vs. “Agentes secretos”
Todos los países tienen servicios de inteligencia, pero la mayoría de sus agentes no operan en secreto o, al menos, no en su día a día. Los verdaderos espías no son empleados de la agencia: son infiltrados que pasan información a los servicios de inteligencia pero que, técnicamente, no son trabajadores de los mismos.