Son cuatro las hipótesis que la CIA manejaba sobre el escenario inmediatamente posterior a la muerte del dictador, en orden de probabilidad: “1) Un régimen autoritario similar al de Franco pero en el que se promueva lo social y la liberalización económica, aunque no las libertades políticas; 2) una dictadura militar de estilo reaccionario; 3) una democracia parlamentaria, ya sea república o monarquía; 4) una dictadura de izquierdas”. A lo largo de la década siguiente, las apuestas irían decantándose por la tercera opción.